Anoche fué la 87ª edición de los Oscars y el momento musical más cometado ha sido la actuación de Lady Gaga. Con motivo del aniversario de "Sonrisas y lágrimas" sorprendió a todo el mundo con una impecable interpretación de un medley de las canciones de la película. Afinadísima, cambiando totalmente de registro y emotiva, dejó a todo el mundo boqueabierto puesto que nadie apostaba por ella para realizar el homenaje. Al final recibió emocionada un abrazo de Julie Andrews que alabó su actuación. Parece que Lady Gaga se ha propuesto ganarse el respeto por su gran voz más allá de sus antiguos escándalos y excentricidades.
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